Mauricio Moreno (Ambato, Ecuador) Poemas Selectos

 

AL FINAL 

Al final del día,  

mis manos vacías están. 

No hay tinta, 

no hay libros. 

No hay trigo, 

no hay pan. 

No hay uvas, 

no hay vino. 

No hay comunión... 

 

Solo una intensa soledad. 

 

Al atardecer, 

mis versos mudos 

desparramados 

en escenarios 

lejanos y extraños,  

en libros perdidos 

en el tiempo, 

no tienen voz ya. 

 

La jaculatoria del fin del día, 

el rosario para mascullar penas 

solo hablan de la verdad: 

que nos rodea la muerte 

y sonríe sin piedad. 

 

Al final de la vida, 

unas manos vacías 

con callos de soledad, 

con lágrimas que se cuelan 

y ruedan a la eternidad. 

TRISTEZA 

Entonces  

me ataca la tristeza 

y me arrastra al suelo 

como un trapo. 

 

Mi nostalgia 

tiene un nombre, 

un apellido, 

una fecha 

y un lugar.  

Está plagada  

de recuerdos 

y una triste realidad 

que suena en vacío; 

me encierra en un cristal. 

 

Mi recuerdo 

es tu perfume 

que embriaga mi vivir 

y destila  

versos tristes sin cesar. 

 

Mi nostalgia, 

está vestida de tí, 

se engalana con tu risa 

y se peina en soledad. 

 

Mi nostalgia 

huele a tí, 

sabe a tí. 

Y estoy seguro, 

que vive en tí. 

TU ADIÓS 

Tu adiós 

ha maldecido mi camino 

porque aparece en cada beso 

que para olvidarte entrego. 

 

Tu adiós, 

me despide cuando salgo 

y me espera cuando llego. 

Se sienta a mi lado,  

me mira, me vigila 

de lejos y de cerca. 

Respira en mi oreja 

presiona mis sentidos. 

 

Tu adiós  

ha partido mi vida 

en un antes y un después. 

En un antes que no cuenta; 

en un después  

que me resta vida. 

 

Tu adiós  

está latente 

todo el día 

y duerme a mi lado en la noche. 

 

Tu adiós, 

es plegaria de cada día 

balbuceada en silencio. 

PRESENCIA 

Hoy he sentido tus pasos 

sin ruido y en silencio. 

En esos versos que leías, 

en aquel libro que los tiene. 

Hoy me inundan 

tu fragancia y tu voz. 

Veo tu mirada

en la música que suena. 

Percibo tu silueta 

en la luz que no alumbra. 

Hoy mi delirio es más fuerte. 

Te tengo a mi lado: 

en la loca soledad, 

en la muda tristeza, 

en el nudo de garganta 

que duelen y atormentan. 

Te siento a mi lado, 

haciendo temblar mi cordura. 

Hoy he vuelto a recordarte 

y en silencio decir tu nombre. 

Hoy me mata tu locura 

que sigue siendo vida... 

Hay tormento de recuerdos 

y felicidad inmensa  

porque mi mente confusa 

aún te recuerda  

como el primer día. 

Acerca del autor

Mauricio Roberto Moreno Sánchez nace en Ambato, Ecuador el 15 de abril de 1961.

Sus padres son: Julia Elvira Sánchez y Luis Ulises Moreno.  Es el quinto de ocho hermanos:  Susana Isabel,  Renee Fabiola, Luis Ulises, Fabián Eduardo, Germán Ernesto, Jorge Manuel y Mario Vinicio. Sus estudios primarios los realizó en su ciudad natal y parte de los secundarios en la ciudad de Quito en el Seminario Salesiano San Patricio. Estudió Educación,  Teologìa y Lenguas, y Linguística. Se ha desempañado como docente, rector y vicerrector de las más prestigiosas instituciones educativas de su ciudad natal.

En el 2003 fue consagrado como Obispo Anglicano para la Diócesis de Santiago y presentado en Nueva York y en Quito paralelamente. En la actualidad ha presentado sus cartas dimisorias al episcopado y se encuentra como un Obispo Emérito.

En la ciudad de Nueva York Recibió un doctorado Honoris Causa en Canon Law. Escribe desde los 17 años de edad. Varios de sus textos han sido traducidos al francés y al chino mandarín. Ha participado en varios festivales y certámenes de poesía organizados por La Casa de Montalvo y el GAD Municipal de Ambato. Ha paseado su poesía y sus versos   por el mundo, pues sus textos  se encuentran en varias antologías en Europa, México, Colombia y Venezuela. Miembro numerario del Colectivo Ciudad Poéetica con quien ha participado en sus dos publicaciones. En la actualidad se desempeña como Vicerrector de la Unidad Educativa Génesis, en la ciudad de  Ambato.

Valoración Literaria

Luego de muchas lunas simples, la luz de otro astro ha rutilado en esta oficina repleta de urgencias y soledades. Mauricio es, indiscutiblemente, el poeta de los ensueños febriles que moran en una agonía perpetua. Los mejores poemas y novelas son tragedias, dijo hoy, Raisa María (periodista, psicóloga y escritora ecuatoriana). Yo no pude sino afirmarlo de inmediato, pues en la mañana había leído estos poemas selectos. Como una hoja que se desprende del origen y vuela libre en los brazos del viento, mis sentimientos llegaron al lugar donde la realidad cae rendida, humilde... postrada a los pies del arte. Es mentira eso que dicen los viandantes sobre la vida, "la realidad es más grande", mentira, porque con Moreno las palabras trascienden al presente, o lo que es lo mismo: no le rinden pleitesía al olvido; se oponen al abandono de los sentimientos mientras gritan con sinceridad que la humanidad aún es tan importante como para hacerle un poema. 

El Carnero.